No todo pasa por la plata: mandos medios priorizan la flexibilidad horaria para cambiar de empleo.

Aunque cada vez cuesta más llegar a fin de mes, al evaluar un cambio de trabajo, la posibilidad de disponer de los horarios y el desarrollo profesional que ofrezca el futuro empleador hoy pican en punta. Expertos aseguran que ya no se trata de una cuestión generacional. Cómo impacta la conexión 7x2. 

Aunque la inflación no da tregua y cada vez cuesta más llegar a fin de mes, al momento de cambiar de trabajo, para los mandos medios, no todo pasa por el salario que le ofrezca el posible nuevo empleador.

Hoy los profesionales priorizan la posibilidad de disponer de sus horarios, como forma de lograr un mejor balance entre vida laboral y personal.

Así surge de una reciente encuesta realizada por el portal de avisos de empleo para mandos medios Execuzone entre unos 2.500 jefes, supervisores y gerentes -en todos los casos, posiciones con personal a cargo- acerca de lo que buscan al cambiar de trabajo.

Puntualmente, ante la pregunta sobre qué prevalecía al realizar un salto hacia otra compañía, el 35% de los consultados se decidió por desarrollo profesional, el 30% dijo una mayor remuneración, el 22% se inclinó por más beneficios y el 13% por cercanía geográfica entre su casa y el trabajo.

Y cuando se los indagó sobre los beneficios que valoraban, el 45% hizo referencia a la flexibilidad horaria, el 33% por el bono, el 14% por días extra de vacaciones y el 8% por un vehículo.

Al respecto, Juan Cruz Viera, Country Manager de Execuzone, señaló que "la encuesta refleja que los profesionales solicitan flexibilidad horaria para seguir capacitándose y tener más tiempo libre."

"En la actualidad -completó- al realizar un cambio laboral es más importante su desarrollo personal y profesional que una mejor remuneración."

Desde Humanbrand, Carolina Buira apuntó que los resultados del sondeo muestran una tendencia que se viene acentuando en los últimos años.

"El mirar más allá del salario e integrar otras variables a la decisión es algo que hoy está presente en todas las generaciones. El tiempo flexible fue una de los primeros beneficios más valorados por la Generación Y, hoy también se integra la X", aseguró.

Es decir, dejó de ser un tema generacional para ser contexto.

"La tecnología hace que los colaboradores estén constantemente conectados con sus trabajos y que respondan mails o lean información fuera del horario de oficina, lo que redunda en una necesidad de encontrar espacios para la vida personal", enfatizó la socia de Humanbrand.

Según contó Buira, en las entrevistas la mayoría de los candidatos, naturalmente, realiza preguntas y planteos como "Yo se que voy a estar conectado 24 horas, ¿cuál es la política de la empresa en cuanto a flex time o home office?".

Hay muchas compañías que aún no cuentan con una política de teletrabajo y dudan en implementarla. Sin embargo, la experiencia muestra que las organizaciones que lo incorporaron no se vieron perjudicadas. Por el contrario, registraron un incremento del compromiso de los empleados y una cultura de trabajo en base a objetivos y resultados.

"Si una compañía le ofrece más dinero a cambio de menos horas destinadas a su ocio, es probable que el postulante diga que no. Hoy ya nadie quiere resignar el tiempo destinado a su vida personal", expresó Viera.

"De hecho, la importancia que se le da a gozar de más días de vacaciones está directamente relacionada con el lugar prioritario que les asignan a esa cuestión", añadió el Country Manager de Execuzone.

Y completó: "A las posiciones ejecutivas y de mandos medios generalmente se les otorga una semana más a los 14 días que corresponden por ley. La empresa la brinda, sin pagarla pero para que la goce el colaborador, para quien ya es una especie de derecho adquirido."

Los cursos pican en punta
De acuerdo con el sondeo, al momento de cambiar de trabajo los profesionales posicionan en el primer puesto del "podio de intereses" el desarrollo profesional que le brinde el futuro empleador.

En esta línea, del relevamiento también surge que a la hora de formarse y capacitarse el 50% lo hace mediante cursos, el 25% con el estudio de idiomas y otro 25% con maestrías.
"Las empresas hoy apuestan fuerte a los cursos, ya que pueden ganan conocimiento específico en el corto plazo y con una inversión considerablemente menor a la que les demanda un posgrado. Además, una maestría no les garantiza que el colaborador, una vez finalizada, se quede en la organización", explicó Viera.

Y al igual que sucede en el caso de la flexibilidad horaria, en el marco de una entrevista, los candidatos indagan cada vez más acerca de las políticas de capacitación.

La pregunta del postulante es mucho más amplia que la clásica "¿Cuáles serán mis próximos pasos en la empresa?". "Los entrevistados van más allá, preguntan sobre las herramientas de desarrollo profesional, sobre el estilo de los líderes, sobre la cultura y los desafíos de la compañía", contó Buira.

"Salir a buscar oportunidades de crecimiento que la empresa actual no da es la constante. Se prioriza trabajar en lugares que ofrezcan desarrollo, no solo de carrera sino también oportunidades de mejorar habilidades y experiencias. Organizaciones que fomenten el espíritu emprendedor, la autonomía y existan verdaderos desafíos con líderes que acompañen esa cultura dando espacio al crecimiento y siendo desarrolladores de personas", concluyó la ejecutiva de Humanbrand.

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